Con repudio recibieron los movimientos de liberación homosexual en Chile, las declaraciones realizadas por el obispo Hédito Espinoza contra la diversidad familiar, en donde catalogó de “tóxina moral” el matrimonio igualitario, asegurando que el rito de unión entre personas debe ser entre un hombre y una mujer.
Desde el Movimiento Unificado de Minorías Sexuales, MUMS, criticaron estas palabras. Su vocero, Gonzalo Cid, aseveró que las palabras del obispo incitan a la violencia.
Las críticas fueron compartidas en el Movimiento de Liberación Homosexual, donde agregaron que este lunes se reunirán con la Dirección de Derechos Humanos de la Cancillería de Chile, donde buscarán tener respuestas sobre la demanda internacional que presentaron contra el Estado chileno por la prohibición del matrimonio igualitario.
En ella analizarán la respuesta del Gobierno, señaló su presidente Rolando Jiménez.
Rolando Jiménez dejó en claro que si la querella no es aceptada por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, insistirán en la Corte, para continuar con la ofensiva internacional por este tema.