Por Vanessa Vargas / El Ciudadano
A través de un comunicado, el Movimiento Por la Diversidad Sexual (MUMS Chile) aseguró que entre los años 2014 y 2016 no han existido campañas comunicacionales preventivas de VIH/SIDA por parte del Ministerio de Salud y que los enfoques de prevención no son acorde a la realidad de la población con mayor prevalencia: los jóvenes homosexuales.
“Esto en contraposición a lo que ocurre con más de 400 personas que mueren al año debido a la ausencia de políticas públicas efectivas en materia de prevención de VIH/SIDA, y más grave aún se ha vulnerado el derecho a la confidencialidad de quienes viven con VIH/SIDA ART. 5to de la ley Ley Nº19779, más conocida como LEY del SIDA, recientemente al ser filtrado a través del Insituto de Salud Pública un listado con las personas que viven con VIH /SIDA en Chile”, argumentaron.
En este contexto, MUMS decidió realizar un giro hacia la disidencia sexual: “Nos hacemos a un lado de la convocatoria oficial de la marcha LTGBIQ+ 2016. Nuestra opinión sobre esta marcha y sus consignas no han sido consideradas por el Frente de la Diversidad Sexual, es por este motivo que no adscribiremos a sus razones”.
A la vez, MUMS anunció que se unirá “La Otra Marcha”, que desde hace un tiempo se plantea como una instancia de protesta alternativa a la tradicional movilización por los derechos de la diversidad sexual. “Junto a esto hacemos un llamado al Frente de la Diversidad Sexual que reconsidere y que retome el camino de la unificación de la comunidad LTGBIQ“, especificaron.
Una de las preocupaciones del movimiento es abordar la lucha contra la serofobia por razones de VIH y SIDA. Por ello, exigieron que desde el Estado se implementen políticas públicas que contribuyan a erradicar este tipo de discriminación.
“También debe ser preocupación y acción de los gobiernos de turno la calidad de vida de las personas viviendo con VIH/SIDA. En este sentido, hacemos un llamado a enfatizar los esfuerzos por fortalecer los Servicios de Salud Pública, a garantizar una Salud digna, de forma gratuita y de calidad”, sentenciaron.
De la misma manera llamaron al Instituto Nacional de la Diversidad e Inclusión INADI a que se replantee la Ley Antidiscriminación, conocida como Ley Zamudio, a la que diversas organizaciones consideran actualmente como letra muerta.
“No sólo queremos derechos filiativos: sino garantías para una vida digna; derecho al trabajo, salud y educación no sexista y de calidad garantizadas por el Estado de Chile para todas las personas”, cerraron.