Durante la Madrugada de este viernes se confirmo la muerte del escritor, artista plástico y defensor de los derechos humanos Pedro Mardones Lemebel, el primero en confirmar la muerte fue su amigo y community Manager Aldo Peran, el cual se entero de su muerte en la madrugada al rededor de 02:00.
Pedro Mardones Lembel, más conocido como Pedro Lemebel constituyo una figura primordial para entender la homosexualidad, el deseo, la marginalidad y la lucha política en la época Dictatorial y Pos-dictatorial. Con su afilada pluma y voz embriagante conquisto a todo aquel que pasaba por su camino. Desde Gladys Marín, Diamela Eltit, Nelly Richard y hasta el filosofo Roberto Bolaños. Este ultimo elogio su obra a nivel nacional e internacional.
Las primeras apariciones de Lemebel en la escena escritural Chilena se fraguaron alrededor de 1983 año en el que gano su primer concurso literario en la caja de compensación Javiera Carrera, con su cuento » Porque el tiempo está cerca». En 1986 Lemebel presento en un acto político de izquierda en Estación Mapocho por primera vez su manifiesto «Hablo por mi diferencia», vestido con los enigmáticos tacos políticos que posteriormente acompañaran toda su carrera, aparece con una hoz y martillo cubriendo la parte izquierda de su cara, exponiendo por primera vez lo que posteriormente sería una parte fundamental de su obra.
Lemebel es y será la figura central Chilena y Latinoamérica que lucho por la homosexualidad, por los derechos humanos y por otro lado también por su fuertes manifestaciones contra el VIH/SID. Luchas que traspasan de forma transversal toda su obra. desde las primeras performances como «La conquista de América» en donde a través de su lenguaje visual increpo la ausencia de los cuerpos desaparecidos en Dictadura, junto a la devastadora efectos de la pandemia del VIH/SIDA. bailando una cueca a pies descalzos sobre un mapa de Latinoamérica cubierto de vidrios rotos. Exponiendo de esta manera la metáfora visual de los cuerpos mutilados y despojados de la vida por parte del Estado y el VIH/SIDA, a través de la sangre que corría por sus pies.
La lucha contra el sida y los derechos humanos en dictadura son parte clave para entender la obra de Lemebel, obras como; Cuerpos Contingentes (1990), Las dos fridas ( 1989), tu dolor dice minado (1993) y Casa particular (1989). Forman parte ineludible de la producción critica y política en relación a los temas de la diversidad sexual, el género, la memoria y las luchas de la sociedad civil. Además Pedro Lemebel ha sido unos de los pocos escritores de la Diversidad Sexual que ha sido traducido a distintos idiomas como el ingles, el francés e italiano, de esta forma siendo su obra difundida a nivel internacional. Una obra tan extensa como diversa, la cual se movió desde la crónica hasta la novela, sus obras más reconocibles fueron; La esquina es mi corazón(1995), Loco afán crónicas de un sidario (1996) , De perlas y cicatrices (1998), zanjón de la guada (2003) , adiós mariquita linda 2004. entre otras.
Pedro Lemebel quedara en nuestros corazones, homosexuales, diversos y disidentes, hay tantas palabras y tantas historias de Lemebel, que escribir una oda a su vida, obra e historia política siempre seria poco, en comparación a las bondades que le otorgo a la política, al arte y a la diversidad. En la historia quedaran los encuentros irónicos y críticos de Pedro Lemebel en Triangulo abierto, las incontables fotos de Julia Toro, Mario Vivado y Gloria Camiruaga, la riqueza visual de sus performance al lado de Francisco Casas en el colectivo Las Yeguas del Apocalipsis.
Atrás quedaran los enriquecedores encuentros con las feministas Raquel Olea, Margarita Pizano entre otras. La Participación de Pedro en la lucha contra la despenalización del artículo 365, los famosos registro de Pedro en Marchas como la del año 1995 con el cartel » Somos una realidad Humana», o las ultimas participaciones en pro de la educación sexual junto a la también fallecida Hija de Perra y el Che de los Gays. Con cuchillas en la garganta se nos fue un luchador proleta, marica y disidente que supo sobrepasar todo estigma social y moral. El sida no lo pudo alcanzar y el cáncer no lo pudo callar. Así muere como una reina en una isla rosa como lo dijo una vez en el programa Radial triangulo abierto. Morirá su cuerpo, pero no su Alma luchadora.
Adiós Mariquita Linda.