Por Deborah Pizarro, CUDS
Este sábado 28 de octubre se realizó la Segunda Marcha del Orgullo y la Diversidad Sexual en la ciudad penquista, donde se reunieron alrededor de 150 personas para marchar por el centro de la ciudad y protestar por sus derechos. Eso bastó para conseguir la presencia de numerosos medios de comunicación locales y nacionales que dieron cuenta de la manifestación. El año pasado apenas una treintena de personas se había dado cita en la misma actividad. Una excelente iniciativa de grupos locales que esperamos siga prosperando y tomando fuerza.
La Segunda Marcha del Orgullo y la Diversidad Sexual en Concepción fue convocada este año por la nueva Colectiva lésbica local “Mafalda” y contó con el apoyo de diversas organizaciones sociales, como la CUT local, Traves Concepción, grupos Feministas de la zona y representantes el Comité por la No Discriminación que viajaron desde Santiago especialmente al encuentro.
Con algunos minutos de retraso y ante la mirada respetuosa de los transeúntes, lxs manifestantes partieron desde los Palacios de Tribunales para marchar por el céntrico paseo peatonal Barros Arana, con dirección a la Plaza de Armas. Si bien la convocatoria invitó a participar con máscaras y antifaces para convencer a lxs más temerosxs, fueron muy pocxs lxs que no se atrevieron a revelar sus identidades. Lxs manifestantes, en su mayor parte mujeres, elevaron llamativos y coloridos lienzos, sin detenerse ni dejar de cantar o hacer gritos de protesta (“la ley, la ley, qué tiene la ley, la ley nos discrimina, por ser lesbianas gay”). Para sorpresa de las organizadoras, lxs transeúntes también se hicieron parte, repitiendo los gritos señalados y aplaudiendo a quienes los entonaban.
Al llegar a la Plaza de Armas, la marcha dio una vuelta alrededor de ésta y algunas miembras del Colectivo Mafalda junto a “Condonito” de Sidacción, cruzaron hacia la Catedral para “jugar” un poco y llamar así la atención de los medios de prensa. Posteriormente y en la misma Plaza, tuvo lugar una ceremonia donde representantes de variadas organizaciones LGTB (Mafalda, MUMS, Traves Concepción, etc.) recitaron diversos discursos con sus respectivos puntos de vista en torno al evento, la realidad LGTB y otros asuntos relacionados. Se felicitó la iniciativa de Mafalda y se resaltó el mérito de llevar a cabo estas iniciativas en regiones. Tras ello, un grupo de música punk se encargó de ponerle ritmo al evento y contagiar tanto a lxs manifestantes como a lxs curiosxs que se iban aglomerando cada vez más.
Para finalizar, llegó el momento cúlmine del evento, donde la pareja fundadora de Mafalda, Alejandra Aguilar (26) y Antonieta Jiménez (22), celebraron un matrimonio simbólico para expresar su descontento ante el vacío legal chileno respecto a las uniones no heterosexuales y su disconformidad ante el promocionado Pacto de Unión Civil (PUC).
Balance de la marcha: éxito total
La marcha se desarrolló en perfecta calma y contó con la respetuosa presencia de curiosos y transeúntes, sin registrarse ningún hecho de violencia ni de lesbihomotransfobia. El accionar de Carabineros también fue amable (la mayoría de los efectivos eran mujeres), quienes se mostraron bastante preocupadxs por resguardar la seguridad y buen desarrollo del evento. No se registró ningún conflicto con la fuerza policial. Destacó también una amplia cobertura de los medios de comunicación de la zona.
Al finalizar el matrimonio, algunxs transeúntes se acercaron a Antonieta y Alejandra para manifestarles sus felicitaciones y darles ánimos y apoyo para que este tipo de iniciativas se mantengan en el tiempo. En este sentido, Alejandra declaró: “fue un éxito total, no lo esperábamos. Superó todas nuestras expectativas. Es increíble cómo en tan poco tiempo (un mes) logramos organizar todo y convocar a la gente. (…) Estuvimos revisando los diarios locales y todo lo que aparece nos es favorable: la percepción de la gente, de la prensa… fue un destape. (…) Pero no lo habríamos logrado sin la ayuda de organizaciones de Santiago, como el MUMS y Rompiendo el Silencio, que nos ayudaron mucho, mucho, a organizar y difundir la información. Sin ellos no lo habríamos logrado nunca, fue fundamental el trabajo en equipo”.
Por su parte y desde Santiago, la vocera del Comité por la No Discriminación, Emma de Ramón, manifestó su apoyo a la iniciativa de Mafalda e hizo notar la fuerza que ha ido cobrando en este último tiempo el movimiento LGTB en nuestro país.
“El movimiento LGTB chileno se puso en marcha y ya no se detendrá hasta que consigamos igualdad ante la ley. Cada día más chilenas y chilenos decimos basta de discriminación, basta de postergaciones, basta de violencia, basta de leyes a medias, basta de resignarnos con las migajas que nos da una sociedad pacata y conservadora. Felicito a las socias del colectivo Mafalda y a todo el movimiento LGTB de Concepción por su entereza y por su valentía. Sigan adelante con su movimiento, que entre todos y todas lograremos la ciudadanía plena”, enfatizó Emma de Ramón, Presidenta de Las Otras Familias y pareja de la jueza Karen Atala.
El Comité por la No Discriminación se ha constituido en el principal referente político de la comunidad LGTB en Chile y es integrado por Movimiento Unificado de Minorías Sexuales, MUMS, la Coordinadora Universitaria por la Diversidad Sexual, CUDS, Las Otras Familias, Centro de Acción Social por la Diversidad de La Pintana, Brigada Gay-Lésbica del PS, UNJIDEM de Lampa, Sidacción, Iglesia Ecuménica Metropolitana, Centro de Acción por la Diversidad de Peñalolén, Exigimos Igualdad, primer referente de bisexuales, Rompiendo el Silencio, Trans masculinos de Rancagua, entre otros.
Estas organizaciones fueron protagonistas el 30 de Septiembre pasado de la marcha en Santiago que se transformó, en su octava versión, en la más concurrida de la historia. Bajo el lema “Ciudadanía plena” se dieron cita en la capital más de 10 mil personas, según datos oficiales proporcionados por Carabineros de Chile.
Matrimonio simbólico y rechazo al PUC
Al interior de la Plaza de Armas, específicamente en la pérgola, tuvo lugar el acto más emotivo del evento. Alejandra y Antonieta avanzaron frontalmente cada una hacia la otra, tomadas del brazo por sus respectivos “padrinos”, llevando unos velos blancos sobre sus cabezas y calas blancas en sus manos. De fondo sonaba la marcha nupcial y numerosos espectadores se amontonaban para observar mejor.
Gonzalo Cid, dirigente de MUMS, fue el encargado de presidir el casorio como “ministro de fe”: “Querido público, queridos gay, queridas transexuales, bisexuales, lesbianas, heterosexuales y agrupaciones en general. Estamos hoy reunidos para que todo Concepción y Chile sepan que el amor es de todas y todos y no limitantes de una condición. Para que todos y todas vean cómo el amor con su poder une a dos mujeres”.
Ya que hoy en día no las puedo casar ni por dios ni por la ley, las uniré a través de amor”. Las novias se aceptaron entre sí, intercambiaron anillos y sellaron todo con un beso, ante numerosos y fuertes aplausos del público asistente. Posteriormente hicieron un brindis y lanzaron sus velos y calas al público, mientras que éste les lanzó arroz al más puro estilo del matrimonio heterosexual.
“Lo hicimos por toda la comunidad homosexual. Fue un regalo para todos y todas. Las emociones que nosotras sentimos tratamos de expresarlas y se logró. Incluso vi a harta gente llorando (risas)… fue bonito, muy, muy bonito”, contó Alejandra..
“Estamos en contra del Pacto de Unión Civil y de la Unión de Hecho. Ambos son soluciones rápidas que no se preocupan de aspectos fundamentales como la lesbomaternidad, por ejemplo. El PUC no nos garantiza un matrimonio con todas las de la ley, un matrimonio igualitario, como el de los heterosexuales, con verdaderos derechos y deberes. Nosotras no queremos ni el principio ni el final, lo queremos TODO, como cualquier persona de este país. Aceptar el PUC es como para que nos digan el día de mañana “pero si les dimos la solución, ahí la tienen”. No queremos eso. Queremos un matrimonio, con las mismas responsabilidades y los mismos derechos, sea de adopción, de casa, de salud. Con todo lo que conlleva un matrimonio”, subrayó Alejandra del colectivo Mafalda.