Ada:
Lo primero que he hecho ha sido sacar el número de teléfono de debajo de la almohada. Me dio temor de que no estuviese, de que se hubiese roto, de que hubiese sido un sueño, pero eso es como el resabio de las telenovelas mexicanas que vi cuando chica. Así como que puro sufrimiento, que pa’ llegar a ser feliz lo errático debe enarbolarse como bandera de lucha. Pero no, es la vida real y el teléfono estaba allí, para que lo marcara, para que hiciera lo que quisiera con él.
Por un momento pensé que debía inventar algo para llamarla, que no debía sonar tonta, que debía sonar como de mundo, canchera. Me decidí por sonar natural y hacer lo que deseaba. Una chica llamada Natalia me dejó un número, lo más probable es que sea su número de teléfono, lo más probable es que me lo haya dejado, pues desea conocerme, entonces que tanto cuento. Es cierto me da nervio, pero tengo que llamarla. El teléfono, para mi tranquilidad, ayuda a promover el anonimato de los gestos inquietos. A mi siempre me suda la nariz cuando estoy nerviosa y prefiero mantener las manos abajo, porque me tiemblan demasiado. Quizás la conversación por teléfono me hará entrar en confianza.
Es bonita la sensación de sorpresa, de esperanza que este papel significa. Parece tonto Ada, pero aunque ame a Lucía sólo deseo darle un beso a esta chica. No quiero parecer patética como el macho que va a engrupir ¿me entiendes?, pero a ti te lo puedo contar: tengo necesidad de que una mujer me acaricie.
El teléfono suena. No hay nadie. Iré a contestar
Día 5 a las 5
Ada:
Me he demorado en escribirte, pues vino Lucía. Conversamos largo rato y me preguntó que qué me pasaba. Yo le dije que no se preocupara que estaba bien, que estaba tratando de solucionar algunas cosas y eso.
Me siento mal. Fui incapaz de decirle nada. Tomó mis manos y yo las retiré rápidamente. Ella pensó que estaba enojada. Si tan sólo se imaginara algo, me serviría para acelerar el momento en que tenga que dejar de mentirle.
Me da miedo pensar en que si se aparece otra mujer se acabe esta necesidad que he establecido por ella (lo que es una posibilidad). Tampoco me gusta que tenga que decírselo con una sensación de miedo tremendo.
Tengo que vencer mi miedo
Tengo que vencer mi historia
Tengo que vencer la naturalidad de Lucía
Tengo que llamar a Natalia
ESCRITO CON VERDE COMO LA ESPERANZA
Hoy leí algo que decía: La mujer no nace se hace, o algo así. Creo que me estoy haciendo, creo que hablar de Lucía no es lo único que me debe importar.
Creo Ada que eres la mejor amiga de Libertina. Cada vez que me hablas me es más fácil encontrarme. Cada vez que me leo, lo cierto, es que te quiero más.
Hoy me di cuenta que detesto del mundo tantas cosas como las que amo.
Iré a llamar a Natalia. Más rato te cuento
Chau, Liber.
Día 5 , night o nigth?
Ada:
Antes de hablarte, preferí salir a andar en bicicleta. Estoy excitadísima. Hablé con Natalia. Te escribiré tal cual como fue la conversación:
Natalia: ¡Hola!
Yo: Hola, Natalia. Me atreví a llamarte, porque me dejaste tu número el otro día…
Natalia: Si, ya te recuerdo, no es difícil, porque yo no le dejo mi número a todo el mundo, Qué bueno que me llamaste!
Yo: Sí, pero la verdad no sé que decirte mas que tenía muchas ganas de hacerlo (Ahí la Natalia se río un poco)
Natalia: Qué bien por tus ganas, porque yo estaba esperando que lo hicieras. ¿Qué te parece si nos juntamos y ahí nos conocemos algo más. Algo así como una cita a ciegas de vidas, pero no de imagen, es decir, no es a ciegas…
Yo: (la bruta titubeó) ehhh…
Natalia: Bueno si quieres…
Yo : Claro que sí!
Natalia: Cuando puedes?
Yo ¿Cuándo tú quieras?
Natalia: Mañana?
Yo : ( La imbécil, mira lo que responde) No, no puedo, tengo que ir a la U…
Natalia: Ah, o sea que no es cuando yo quiera como me lo había dicho!
Yo: Puedes hoy?
Natalia: Sí. Te parece en el mismo lugar a las 10:00?
Yo : Sí.
Natalia: Ya poh, nos vemos, un beso..
pffYo: Un beso.
Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Estoy histérica, Ada, estoy histérica.
Ya son las 9!. Mañana te cuento lo que pasó